GÉNERO: ficción, acción, romance, drama, tragedia
AÑO: 2004
EPISODIOS: 16
IDIOMA: coreano
REPARTO:
Kim Tae Hee es Yoon Shi-yeon
Jo Hyun Jae es el inspector Kang Min-woo
Jun Jin es Moo-young
Han Ye Seul es Chae-yi
Park Joon Seok es Rang
Uhm Tae Woong es Sa-joon
Lee Hwi Hyang es el senador Shin Soo-jang
Dok Go Young Jae es el jefe de oficinas Jang
Kwon Hae Hyo es el inspector Moon
Jung Kook Jin es K
Lee Sang In es Kim Young-mo
Kim Ji Woo es Min-joo
Ye Ryung es Kang Joo-sun
Suh Yeon Joo es Jung Se-kyung
Kim Hak Chul es Nam Jun Wu
Kim Ye Jin
Sun Woo Sun
Seo Yoo Jung
PRODUCCIÓN:
Productor: Jin Hyung WookDirector: Kim Hyung Il
Guionista: Hwang Sung Yun / Lee Kyung Mi
ARGUMENTO: durante milenios los míticos zorros de nueve colas han vivido entre nosotros sobreviviendo a base de hígado humano. Shi Yeon, en apariencia una empleada cualquiera del Museo de Historia Natural, es en realidad una de las más temibles guerreras del Clan del Zorro, una organización de zorros de nueve colas que lucha por preservar el frágil balance entre su raza y la humana.
El Investigador de Policía Kang Min Woo se cruza en el camino de los zorros cuando persigue a una banda de traficantes de órganos. Sobrevive a duras penas pero ahora que conoce el secreto de su existencia ... ¿tiene permitido vivir?
Shi Yeon recibe la orden de acabar con este policía curioso pero duda porque un misterioso pasado que trasciende a mucho más atrás de lo que ninguno puede imaginar los une.
El Investigador de Policía Kang Min Woo se cruza en el camino de los zorros cuando persigue a una banda de traficantes de órganos. Sobrevive a duras penas pero ahora que conoce el secreto de su existencia ... ¿tiene permitido vivir?
Shi Yeon recibe la orden de acabar con este policía curioso pero duda porque un misterioso pasado que trasciende a mucho más atrás de lo que ninguno puede imaginar los une.
OPINIÓN PERSONAL: simplemente a veces necesito ver una serie como ésta. Una serie de acción, ficción y romance abrumador. Si tuviera que hacerle una crítica sería en dos partes, con sus pros y sus contras.
Por un lado, la parte de acción y espionaje como me pasa con muchos doramas (excepciones hechas) deja bastante que desear. Es decir, no es aburrido ni mucho menos pero la verdad, para ser zorros con milenios de experiencia en ocultar su existencia no son muy brillantes. Lo mismo podría decirse de la Agencia Especial que los persigue, la sagacidad y observación no es lo suyo. Es decir, ¿cómo te puedes cruzar 3 veces con una persona y no reconocer su cara? ¿Cómo no pueden sacar una conclusión cuando todas las pistas indican en una sola dirección? Bueno, supongo que habrá que darle carta blanca tomando en cuenta que es del año 2004 y que su centro no es el misterio.
Y a pesar de todo me ha enganchado y me la he tragado de carrerilla de comienzo a fin. ¿Por qué? Porque sin duda el fuerte de este dorama es su riqueza emocional. Los secretos, la nostalgia, la tragedia, los celos, la envidia, la venganza, la camaradería, la amistad y un gran amor prohibido. Todos sabemos lo que nos gustan los amores prohibidos ¿verdad? Esos sentimientos que mantienen a los personajes constantemente en la cuerda floja, los que hacen a nuestro corazón latir, detenerse y volver a latir...esos son precisamente los grandes puntos que me han cautivado.
De la mano de esas emociones llegan escenas verdaderamente bonitas, cargadas de nostalgia, son escenas hechas con gusto, como un cuadro, para ser bonitas aun en la tristeza, e inolvidables. Así que se puede hacer del melodrama una obra de arte.
Pero como pasa a menudo con los doramas peca el final. Dejando al margen si acaba bien o acaba mal (queda para vosotros ver y juzgar) es un final repentino e innecesariamente corto. Pero ya me lo veía venir cuando quedaban 10 minutos del último episodio y aquello no tenía pinta de acabar por ninguna parte. Un final sin sorpresas, casi como un corte, que me dejó pensando ¿y ya está? La verdad, no estaría de más un epílogo. ¿Qué pasó después? ¿Sirvieron de algo todas las tristezas y batallas, todos los sacrificios? ¿Qué es de los personajes? Sí, sin duda el final podría haber dado mucho más jugo pero o bien a los guionistas se les acabaron las ideas o bien se quedaron sin tiempo para ponerlas. Lo que está claro es que un buen final hubiera hecho de este drama una huella perenne en mi memoria.
Lo que sin duda se merece un oscar es la banda sonora. Acompañando a cada escena la música perfecta, la canción que nunca podrás olvidar. Y es que definitivamente le daría un premio a la dirección de este dorama no solo por contarnos una historia sino por hacerlo de forma bonita, con la belleza melodramática de sus escenas y la música que las acompaña. Y por cierto, dormaniac@s, ¿os habéis fijado en el reparto? ¡Qué pedazo de reparto! Si hasta el más secundario de los personajes es hoy una cara conocida.
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Por un lado, la parte de acción y espionaje como me pasa con muchos doramas (excepciones hechas) deja bastante que desear. Es decir, no es aburrido ni mucho menos pero la verdad, para ser zorros con milenios de experiencia en ocultar su existencia no son muy brillantes. Lo mismo podría decirse de la Agencia Especial que los persigue, la sagacidad y observación no es lo suyo. Es decir, ¿cómo te puedes cruzar 3 veces con una persona y no reconocer su cara? ¿Cómo no pueden sacar una conclusión cuando todas las pistas indican en una sola dirección? Bueno, supongo que habrá que darle carta blanca tomando en cuenta que es del año 2004 y que su centro no es el misterio.
Y a pesar de todo me ha enganchado y me la he tragado de carrerilla de comienzo a fin. ¿Por qué? Porque sin duda el fuerte de este dorama es su riqueza emocional. Los secretos, la nostalgia, la tragedia, los celos, la envidia, la venganza, la camaradería, la amistad y un gran amor prohibido. Todos sabemos lo que nos gustan los amores prohibidos ¿verdad? Esos sentimientos que mantienen a los personajes constantemente en la cuerda floja, los que hacen a nuestro corazón latir, detenerse y volver a latir...esos son precisamente los grandes puntos que me han cautivado.
De la mano de esas emociones llegan escenas verdaderamente bonitas, cargadas de nostalgia, son escenas hechas con gusto, como un cuadro, para ser bonitas aun en la tristeza, e inolvidables. Así que se puede hacer del melodrama una obra de arte.
Pero como pasa a menudo con los doramas peca el final. Dejando al margen si acaba bien o acaba mal (queda para vosotros ver y juzgar) es un final repentino e innecesariamente corto. Pero ya me lo veía venir cuando quedaban 10 minutos del último episodio y aquello no tenía pinta de acabar por ninguna parte. Un final sin sorpresas, casi como un corte, que me dejó pensando ¿y ya está? La verdad, no estaría de más un epílogo. ¿Qué pasó después? ¿Sirvieron de algo todas las tristezas y batallas, todos los sacrificios? ¿Qué es de los personajes? Sí, sin duda el final podría haber dado mucho más jugo pero o bien a los guionistas se les acabaron las ideas o bien se quedaron sin tiempo para ponerlas. Lo que está claro es que un buen final hubiera hecho de este drama una huella perenne en mi memoria.
Lo que sin duda se merece un oscar es la banda sonora. Acompañando a cada escena la música perfecta, la canción que nunca podrás olvidar. Y es que definitivamente le daría un premio a la dirección de este dorama no solo por contarnos una historia sino por hacerlo de forma bonita, con la belleza melodramática de sus escenas y la música que las acompaña. Y por cierto, dormaniac@s, ¿os habéis fijado en el reparto? ¡Qué pedazo de reparto! Si hasta el más secundario de los personajes es hoy una cara conocida.
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